Su autoconsumo, después de la jornada laboral

Por: / http://www.periodicovictoria.cu

“Ya tenemos hasta los tanques para la lumbricultura acabaditos de techar” sostiene la juvenil jefa de planta. FOTOS: Wiltse Javier Peña Hijuelos
“Ya tenemos hasta los tanques para la lumbricultura acabaditos de techar” sostiene la juvenil jefa de planta. FOTOS: Wiltse Javier Peña Hijuelos

A mediados de la covid-19 visité la Fábrica de Vinos y Aguardientes, a la salida de La Fe, por la carretera que va al sur. Entonces comenzaron la trasformación de sus áreas verdes en terrenos de cultivo. Hoy los cuatro lados, bandas o laterales del edificio rectangular que la caracteriza están aprovechados en su totalidad.

“Tenemos plátano macho, burro y de fruta -detalla la jefa de planta, Yanis Céspedes Bartelemí, una de las más jóvenes dentro del colectivo al cual dirige-, y también calabaza, maíz, boniato, habichuela, melón, ajo porro, quimbombó, ají cachucha y otras plantas… pero estas de condimento”

La atención a lo sembrado va por todos: “… quien no tiene una ocupación de momento, por cualquier motivo -agrega-, se muda para el autoconsumo. Los demás, lo hacen después de su jornada laboral”

Ya hicieron tamales el Día de los Padres, arroz con maíz tierno, potajes, sopas… “Tenemos un comedor dentro del centro -refiere la jefa del grupo- y a todos interesa completar el menú, enriquecerlo tanto como se pueda, que haya cuatro, cinco o seis platos diferentes a la hora del almuerzo. Y no va a ser así, si no se logra con nuestro esfuerzo”

No se detienen en el laboreo de la tierra, la atención a lo sembrado o lo por sembrar, van más allá: “venga para que vea los tanques de cemento, acabaditos de techar con guano… Nos falta solo ponerle el alimento de las lombrices. De ahí va a salir el abono para fertilizar la tierra y hacerla producir más”

En la Fábrica de Vinos y Aguardientes -donde no tomé ni agua, nadie lo dude, soy abstemio-, se hicieron eco, a tiempo, del llamado que realizaran las direcciones del Partido y el Gobierno en el territorio: que no quede un centro de trabajo, una empresa o entidad sin tener su parcela y hacerla producir.

La sostenibilidad alimentaria es posible. Y la alcanzaremos antes si cada uno hace su aporte. Un trabajador, un estudiante, se siente mejor y rinde más si su organismo recibe los nutrientes necesarios, a su hora, y le fortalecen. La solución, en nuestras condiciones actuales, pasa por el surco.

Otros temas relacionados:

https://www.minag.gob.cu/noticias/mujer-lider-todo-un-ejemplo-en-la-agricultura/

http://www.cubadebate.cu/especiales/2021/10/10/ruralidad-y-genero-desafios-mas-alla-de-las-cifras/



Tu valoración

1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (2 votos, promedio: 5,00 de 5)

Por: Wiltse Javier Peña Hijuelos/ http://www.periodicovictoria.cu20/07/2023

¿Qué Opina Usted?

Por si acaso, su email no se mostrará