SERVICIOS VETERINARIOS DE FRONTERA Y LA ACTIVIDAD DE CUARENTENA Y CONTROL DEL COMERCIO INTERNACIONAL (tercera parte)
Por: Dra. María Gloria Vidal Rivalta, del Centro Nacional de Sanidad Vegetal (CENASA), Perteneciente al Ministerio de la Agricultura
20 de abril 2024
Durante el mes de febrero, teniendo en cuenta que es frecuente que las personas indaguen sobre los animales que pueden exportarse además de los perros y gatos, pensando que solo se trata de normativas impuestas por nuestro servicio veterinario, les instamos a conocer como se norman las exportaciones de animales y productos de origen animal, por la Organización Mundial de Sanidad Animal y como los países miembros las cumplen, ya que participan en la aprobación de las mismas.
Les instamos a revisar que en el Código Terrestre de la OMSA en el que se establecen, en el Título 5, las Medidas comerciales, procedimientos de Importación y Exportación y Certificación Veterinaria, que suman un total de 13 normas, entre las que aparecen: las obligaciones generales en materia de certificación, los procedimientos de certificación; los procedimientos relacionados con las Medidas Sanitarias y Fitosanitarias de la OMC; las medidas zoosanitarias que se deben aplicar antes de la salida y a la salida, más las que deben aplicarse durante el tránsito entre la salida del país exportador y el lugar de llegada del país importador.
También se mencionaron otras normas relacionadas con los Puertos fronterizos y estaciones de cuarentena en el país importador; las Medidas zoosanitarias que se deben aplicar a la llegada; el Transporte internacional y contención en los laboratorios de agentes patógenos de los animales; las Medidas de cuarentena aplicables a los primates no humanos; los Modelos de Certificados veterinarios para el comercio internacional de animales vivos, huevos para incubar y productos de origen animal; el Modelo de certificado veterinario para los desplazamientos internacionales de perros gatos y hurones procedentes de países considerados infectados de rabia; el Modelo de pasaporte para desplazamientos internacionales de caballos de competición; así como el Certificado Veterinario para el comercio internacional de animales de laboratorio.
Todas esas normas, que aparecen en el sitio www.woha.org son las que el servicio veterinario de cada país miembro de la OMSA, debe asumir para la posible aprobación de una certificación de exportación, tanto si es, el país de origen, como el importador en el país de destino. Además siempre se tienen en cuenta otra serie de factores asociados a la exportación/importación, como por ejemplo la situación zoosanitaria del país de origen/destino entre otros riesgos que pueden estar asociados a estos.
En la sección siguiente, explicamos las razones de índole sanitaria que asisten al centro, para aceptar o no, la autorización de procesos de importación de animales vivos.
Las importaciones de animales vivos están sujetas a normas establecidas igualmente por la OMSA y consecuentemente, por las autoridades veterinarias de los países importadores y debemos señalar que los procesos para el ingreso de animales a un país, llevan implícitos estudios previos, análisis de riesgo, armonización de requisitos entre los servicios veterinarios entre los países de origen y destino, así como los recursos, que aseguren que dichas importaciones garanticen la salud, el bienestar y la seguridad de los animales y también de todo el personal involucrado en estas actividades.
La cuarentena animal puede definirse como la restricción impuesta por las autoridades de la sanidad animal de un país, para prevenir la introducción de enfermedades mediante los animales y productos de ese origen. Son medidas sanitarias netamente preventivas. Si hablamos de importaciones son cuarentenas externas, ya que para combatir enfermedades que ya existen en un país, se denominan internas.
Se precisó que para ejecutar una importación de animales, hay todo un trabajo previo en origen y para recibir a los animales en destino (país receptor/importador). En origen (país emisor/exportador), se seleccionan a los animales, se les mantienen en un recinto de cuarentena (establecimiento que debe tener toda una serie de condiciones estructurales, higiénicas y que propicien el manejo zootécnico de la especie en cuestión) y en el que el personal mantiene una estricta vigilancia de los animales, a los que se les se realizan determinados exámenes clínicos, pruebas diagnósticas, entre otras acciones igualmente importantes como por ejemplo, sobre la alimentación, la higienización de las áreas de estabulación, todas aquellas que coadyuven a su buena condición sanitaria.
Vencido el periodo de cuarentena, variable en cuanto tiempo según las especies y otras valoraciones epidemiológicas, se realiza el proceso de liberación, de transportación segura hacia el destino y al arribo igualmente van a un área de cuarentena, la cual requiere también de todas las condiciones antes mencionadas, hasta su liberación, al destino final de acuerdo al propósito definido para la importación.
En marzo comentamos, como en la práctica se hizo posible importar animales de fauna silvestre desde la República de Namibia, con destino final del Parque Zoológico Nacional de Cuba.
Gracias a las relaciones existentes entre los gobiernos de Cuba y Namibia, las representaciones diplomáticas y el intercambio profesional entre ambas autoridades veterinarias se hizo posible la donación de los animales con destino al PZN de nuestro país. Inicialmente se realizaron reuniones para establecer las bases del trabajo a ejecutar en materia de cuarentena animal, esto llevaba estudios previos y los correspondientes análisis de riesgo.
Por el país de origen, la selección de los animales, de acuerdo a las especies y el número de ejemplares, así como el establecimiento del área de cuarentena, su duración, las condiciones de manejo, el personal responsable, la valoración clínico-epidemiológica, pruebas diagnósticas, evaluación de los resultados, modo de actuación ante cualquier situación adversa, todo esto manteniendo intercambio de información entre ambos servicios, a través de los veterinarios cubanos y con los responsables a través en origen y destino. Fue un período de ardua labor. A su vez aquí preparándose el arribo por el AIJM y cuarentena en destino.
Al término del período de cuarentena, la transportación aérea en la cual estuvieron los médicos veterinarios nuestros y preparados para la llegada al aeropuerto y la conducción hacia la cuarentena en el zoológico nacional.
Igualmente, ya se habían preparado los recintos acá y el personal seleccionado para su atención y manejo, los medios necesarios para ello, también el personal y los medios diagnósticos para las investigaciones en destino, hasta culminar la cuarentena y poder incorporar a los animales en sus áreas de exhibición.
Como pueden ver las cuarentenas en general y las de esta magnitud en particular, llevan meses de estudio, análisis, preparación, disposición de recursos humanos, financieros y materiales de alta especialización, para que resulten exitosos y sin riesgos o accidentes para los animales y para el personal involucrado en los mismos, que no solo en este caso, incluyó al personal del CENASA y el Parque Zoológico Nacional, sino de otras instituciones como el CENSA.
Se cerró el mes de marzo con la felicitación sincera a todos los trabajadores de la Medicina Veterinaria del país y explicando sobre el desarrollo de la Jornada Nacional del 4 al 24 de marzo y el Acto nacional, que por tercera ocasión consecutiva, se realizó en la provincia de Guantánamo.