Por: Dirección Jurídica y Grupo Web del Minag
El nuevo modelo de gestión económica, que se gesta para flexibilizar la relación laboral y salarial del trabajador agropecuario en el sistema de la agricultura, transita por la promulgación de varias disposiciones jurídicas que reconozcan diferentes figuras que participan en la producción agropecuaria y requieren realizar sus labores en similares condiciones a la de los actores no estatales.
El Ministerio de la Agricultura de Cuba trabaja para el reconocimiento legal como productores agropecuarios, de toda persona natural que realiza una actividad económica vinculada a la producción de alimentos, aunque no posea tierra en propiedad ni en usufructo.
Se trata, por citar un ejemplo, de los apicultores. En estos días, es muy probable que cientos de apicultores se encuentren inmersos en la tarea de cambiar sus colmenas de unas zonas a otras, lo que mundialmente y desde tiempos remotos se conoce como “trashumancia apícola”, razón por la cual para la producción de la miel no es primordial ser titular de tierras ni ser parte en un contrato de usufructo.
Como los apicultores, existen otros productores directamente vinculados a la producción de alimentos que no encuentran en la normativa vigente el reconocimiento legal preciso para el buen desenvolvimiento de su labor.
Otra novedad del modelo es el Gestor de fuerza de trabajo agropecuaria y el Jefe de Colectivo agropecuario como modalidades de empleo que se reconocerán para contrarrestar algunas de las problemáticas existentes en este sentido.
En el caso del Gestor de fuerza de trabajo agropecuaria, de hecho, lo encontramos principalmente en los polos productivos y en picos de cosecha cuando ejercen esta función contratada por productores, sin abonar los pagos correspondientes por conceptos de impuestos ni aportar a la seguridad social.
El paquete normativo que implementa este nuevo modelo de gestión en proceso de elaboración, también reconoce las experiencias de vinculación de usufructuarios de tierras a empresas estatales y a cooperativas agropecuarias, así como la necesidad de ampliar y establecer las líneas generales y las pautas a seguir en los procedimientos de vinculación de los usufructuarios de tierra con los sujetos económicos autorizados para ello.
La disponibilidad de fuerza de trabajo para el desarrollo de los programas agropecuarios se mantiene como uno de los principales retos a enfrentar y desde la legalidad el Ministerio de la Agricultura se busca contribuir a crear un ambiente propicio para dinamizar la producción agropecuaria.