MIASIS POR COCHLIOMYIA HOMINIVORAX
Por: Dra. Excira Durán Laugart del Centro Nacional de Sanidad Animal (CENASA), perteneciente al Ministerio de la Agricultura
30 de mayo 2024
Esta miasis es producida por larvas (gusano barrenador del ganado) de la mosca por Cochliomyia hominivorax (Coquerel) que se alimentan de tejido vivo de los mamíferos y rara vez de las aves. La mosca tiene casi el doble del tamaño de una mosca casera corriente, es de color azul verdoso y tiene ojos grandes de color rojizo anaranjado. La hembra, se aparea sólo una (1) vez en su vida. Este apareamiento fecunda todos sus huevecillos, que deposita en grupos hasta de cuatrocientos (400) en los bordes de cualquier herida.
La larva de Cochliomyia hominivorax (GBG) se alimenta del tejido vivo en heridas, a diferencia de las larvas de otros dípteros que se alimentan solamente de tejido muerto. Las lesiones son típicas con exudaciones odoríferas altamente desagradables. También se le conoce comúnmente en el mundo con el nombre de gusano barrenador del ganado, «bichera», «queresa» o «gusanera». Esta miasis Afecta a los mamíferos, incluidos los humanos, que residen principalmente en las áreas tropicales y subtropicales.
Esta miasis se desarrolla en heridas u orificios naturales (incluyendo algunas tan pequeñas como las picaduras de garrapatas, el cordón umbilical de los animales recién nacidos), expuestos de animales de sangre caliente, incluyendo seres humanos. Los rangos óptimos de temperatura para el desarrollo de esta infestación, se encuentra entre 21,8° C y 37,8° C.
Los animales infestados con las larvas deCochliomyia hominivoraxpueden llegar a morir en pocos días si las heridas no son tratadas. Estos animales sufren de malestar general, inapetencia, y las hembras producen menos leche.
Las lesiones son típicas con exudaciones odoríferas altamente desagradables.
Con el objetivo de prevenir esta miasis de debe reducir el riesgo de presentación de heridas en los animales, ejecutar las medidas de prevención para las prácticas veterinarias y ganaderas que producen heridas, como los partos, el marcado, el descorné y la castración, haciendo hincapié fundamentalmente durante esta etapa de alto riesgo.
Además utilizar compuestos organofosforados mediante la aspersión o inmersión del ganado susceptible para disminuir la infestación ectoparásitos.
También revisar las heridas en busca de masas de huevos y larvas, así como tratar las heridas infestadas con un insecticida recomendado o el uso de plantas medicinales.
Siempre ante una sospecha de esta miasis se debe consultar al médico veterinario.