Manejo sostenible a favor de la producción y el medio ambiente

Por: Tomado de Periódico Adelante.

El Proyecto Manejo Sostenible de Tierras en paisajes agroforestales y ganaderos, dirigido por el Centro de Investigaciones del Medio Ambiente de Camagüey (Cimac), destaca entre las contribuciones a la cultura general y a la apropiación del conocimiento sobre estos temas, útiles para la toma de decisiones y el desarrollo del sector agropecuario en el territorio.

Su objetivo fundamental es lograr la aplicación de buenas prácticas, como la utilización de sistemas silvopastoriles (combinación de especies forestales o frutales y animales, sin la presencia de cultivos), el manejo y conservación del suelo y el uso de tecnologías adecuadas.

Además, abarca herramientas como el modelo de ordenamiento ambiental, el plan de adaptación al cambio climático y la ejecución de diferentes programas de desarrollo que luego responderán a las estrategias económicas de cuatro municipios: Camagüey, Jimaguayú, Sierra de Cubitas y algunas acciones en Florida. Desde el 2020 comenzó su realización y debe culminar en el 2024.

El proyecto le ofrece especial relevancia a los árboles pertenecientes a la familia de las leguminosas, a partir de la evaluación de su impacto ambiental liderada por los expertos que arroja que estos aportan nitrógeno al suelo, captan dióxido de carbono de la atmósfera y mejoran la parte hídrica de los terrenos, entre otras bondades.

Asimismo, mejoran el ecosistema al favorecer la macrofauna (aves y otros tipos de especies) de esos lugares, y la microfauna del suelo, ya que los microorganismos ayudan a su nutrición.

Los árboles tienen gran importancia en la alimentación de los animales y entre sus beneficios figura el que protegen los pastos, la leguminosa nutre el suelo, mientras que el pasto absorbe de la tierra y los animales disponen de una dieta balanceada, pues ingieren energía y proteínas.

La ganadería es considerada una de las que más contamina el medio ambiente, debido a la emisión de metano, muy superior cuando solo existen pastos, de ahí el valor de los sistemas silvopastoriles que defiende el proyecto.

Ante tal problemática algunos países han optado por eliminar esta actividad, sin embargo en Cuba y en el territorio camagüeyano, el mayor productor de leche y carne de la nación, se aboga por un manejo más eficiente de los recursos naturales y el aprovechamiento de las posibilidades del clima tropical tras la búsqueda de mejores resultados de esta rama económica.

En el municipio de Camagüey, donde se implementa el citado sistema de pastos, aumenta la cultura por parte de los ganaderos, pero no toda la que se quiere, pues el desempeño aún no constituye el adecuado; y existen creencias de que donde hay árboles no crecerán pastos, lo cual es erróneo según explicó Madelín Cruz, Investigadora Auxiliar del Cimac y coordinadora de la iniciativa.

La especialista enfatizó que los sistemas silvopastoriles son muy importantes por lo que aportan al terreno, a los animales y al medio ambiente.

Publicaciones en revistas y la realización de Trabajos de Diploma y tesis de Maestría, así como la aprobación del tema de Doctorado en Ciencias Ambientales de una de las integrantes, resaltan entre los resultados hasta la fecha.

Destaca a su vez la culminación de los programas de desarrollo de suelo y silvopastoreo, cuyo cierre está previsto durante el actual año.

Ejemplificó que en Jimaguayú se han aplicado medidas de conservación de la superficie, se estudiaron los factores limitantes, y realizaron el monitoreo del agua y los suelos de esa región, información que después se transmite a los productores, organismos y entidades implicados.

El Proyecto Manejo Sostenible de Tierras en paisajes agroforestales y ganaderos es vital porque comprende todo lo que se halla en los lugares seleccionados: instituciones, construcciones, ecosistemas y las poblaciones.

Dedica una parte fundamental a la ganadería, algo que resulta básico, pues los árboles son fundamentales en la protección de las especies, de los terrenos y en que se pueda mantener, mediante ese tipo de alimentación, la producción estable de carne y leche en la región agramontina.

El referido Centro de Investigaciones del Medio Ambiente se fundó en 1996 y posee la misión de ejecutar y socializar proyectos que contribuyan a la conservación y el manejo del potencial natural y socioeconómico para el logro de un desarrollo sostenible.

Este y otros proyectos que responden a programas territoriales ponen el conocimiento en función de los objetivos de avance y tributan información y resultados muy valiosos de cara a los próximos años, que requieren una proyección más amigable con el entorno y el manejo óptimo de los recursos ubicados a nuestro alrededor.