El ejemplo de Sí se puede en La Jatía, de Jiguaní
Por: Juan Farrell Villa
29 de mayo 2024
Casi 54 años, de los 55 que tiene de vida, lleva el campesino jiguanisero Luis Enrique Duany Machado desandando por el campo: “Apenas comencé a caminar, y salía detrás de algún familiar, atado a los encantos y el aroma de las plantaciones”, evoca quien sigue prendido de la tierra en La Jatía.
Asociado a la organización de base de la Anap, en la cooperativa de créditos y servicios Ignacio Pérez, es productor de cultivos varios y de la cría de ganado vacuno y ovino, en una finca de 14. 4 hectáreas de extensión, la que recibió en usufructo.
“Lo primero que hago al acometer la tarea es estudiar y preguntar, y lo otro, atender con amor el suelo, los cultivos y los animales”, expresó cuando ejemplifica como enfrenta las dificultades y el problema que obstaculice su trabajo.
“Para que vea, el terreno que cogí fue declarado no apto para los cultivos varios y demostré que es posible ponerlo a producir con el mejoramiento del suelo e inteligencia, que donde no da una mata no va, ni gastar semillas para no cosechar el fruto, tampoco lo hago. Por eso le puse a mi finca Sí se puede¨.
El usufructuario ratificó su compromiso de entregar 22 litros de leche fresca de vaca diaria que tiene como plan, a partir de junio próximo, y al propósito de vender cada año, una tonelada de carne del ovino, al contar con los pies de cría, sementales y demás condiciones para lograrlo.
Vanguardia nacional en la emulación por el 17 de Mayo, Duany, como todos le llaman, aplica a la siembra materia orgánica, que produce con buenos rendimientos agrícolas, mientras garantiza el riego, con el tiro de agua, con tracción animal, cada mañana, desde el Río Contramaestre.
“Soy optimista y tengo plena confianza en lo que está haciéndose en la rehabilitación de las redes hidráulicas del polo productivo de Cauto La Yaya, con una inversión millonaria en momentos tan difíciles para la economía nacional.¨
Orgulloso de su tradición familiar, de padre y abuelos, destacó el apoyo laboral de la esposa, hermanos y sobrinos para hacer avanzar la producción de alimentos.
A sus méritos como campesino, se suman el de ser combatiente internacionalista en la liberación de la República Popular de Angola e integrar las filas del Partido Comunista de Cuba.