El cultivo arrocero en Cienfuegos, un nexo económico entre naciones
Por: Delvis Toledo De la Cruz / Fotos por Delvis Toledo De la Cruz
El jefe del grupo regional del proyecto Vietnam-Cuba, Tu Pham Ngoc, vinculado al desarrollo del cultivo arrocero en la Mayor de las Antillas, expresó recientemente en un taller en el que participaron especialistas de Cienfuegos, Mayabeque y Matanzas, su interés en demostrar la efectividad del trabajo de ese cultivo en nuestros suelos. Uno de ellos es Frank Michel Becerra Miranda, quien apuesta por este grano como principal baza desde su natal municipio de Aguada de Pasajeros.
“Como productor extensionista, dentro de mis funciones está la producción de variedades en la provincia de Cienfuegos. Comenzamos con su aplicación hace ya un tiempo, básicamente con tres de ellas, de origen vietnamita, la OM 8017, OM 31 y OM 7669.
“A priori, el objetivo era ver cómo se desempeñaba el proceso de cada una en su adaptación a nuestras tierras y el clima”, relata Becerra, quien es productor de la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) Sergio González López, afiliado también desde hace 12 años al Instituto de Investigaciones de Granos (IIG), entidad que engloba un total de 37 proyectos dirigidos a resolver diversos problemas del universo agrícola en el país.
El granjero asegura que constituyen variedades muy eficaces, pues son de ciclo corto; de 90 días, y dadas las características del territorio aguadense, son en extremo valoradas debido a la carencia de agua para su riego.
“Durante la campaña de frío hicimos las primeras pruebas con el sistema de trasplante mecanizado, y obtuvimos resultados muy favorables para la CCS. En la presente, lo estamos ejecutando con la modalidad de siembra directa, cuyo objetivo no es solamente analizar la adaptabilidad, sino acometer procedimientos en cuanto a la fase de pre germinación y en labores de preparación de suelos”, comentó.
Los paisanos vietnamitas han instado a los cubanos en sus reiterados intercambios, a obtener de esta práctica una forma de validar el impacto de las estrategias aplicadas, y extender el conocimiento hacia los productores, en aras de aumentar el número de personas en la Isla vinculadas al cultivo del arroz.
En tal sentido, Becerra argumenta que la siembra directa es mucho más económica, porque las plantas de la nación asiática requieren bajos insumos y no son tan susceptibles a las enfermedades y plagas. “Al tener un ciclo más breve, están menos expuestas a las inclemencias”, estima.
En la retroalimentación, el intercambio de experiencias, el apoyo al crecimiento de la agroindustria arrocera, en especial dentro de la provincia de Cienfuegos, representan aspectos medulares que demuestran el excelente estado de los vínculos entre Cuba y el país de los anamitas tras más de 60 años de relaciones diplomáticas.