De la campiña al corazón
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12 de marzo 2025

Cada lugar tiene historias ocultas, de esas que solo conocen sus pobladores. Esta es la de Virgen Vera Reyes, una mujer de 56 años que todos los días se levanta antes del amanecer, pone a colar su cafetera y comienza su labor en el campo, sin saber cuándo culmina su jornada.
Orgullosa de tener fuerzas para cultivar la tierra y de poder ver el fruto de su trabajo reflejado, resulta para esta labriega una satisfacción inmensa, acompañada del agradecimiento y el cariño de sus coterráneos .
Virgen es una mujer con la estirpe de Mariana Grajales y dirige hace cinco años un colectivo laboral que junto al apoyo de su gente ha convertido en uno de los más importantes de la Empresa Agropecuaria Horquita, de Abreus , por sus excelentes resultados en cuanto a cosechas.
“Esta tierra la empecé a trabajar hace ocho años, acabadita de llegar de Santiago de Cuba, provincia donde nací, y esto era un monte lleno de marabú. Las siembras no se daban, y mira que pasamos trabajo para limpiarla y convertirla en lo que es hoy “. Así rememoraba sus inicios en estos lares a los que tanto le ha dado.
“Aquí mismo me construyeron mi casita, justo en el lugar donde dedico la mayor parte de mi tiempo porque siempre estoy permanente estoy pegada al surco”, cuenta esta entusiasta federada.
Aunque desde muy joven está acostumbrada al fuerte laboreo de sol a sol, las energías no son las mismas que antes, pero asegura que continuará sembrando mientras tenga fuerzas.
“Yo soy feliz en mi campo y si me tengo que morir será aquí en mi campo, trabajando la tierra, porque la tierra siempre me devuelve el amor que yo le doy”, concluyó.