“Ciego de Ávila es Cuba”

Por: Filiberto Pérez Carvajal/Periódico Invasor

13 de septiembre 2024

En lo que resta de 2024, los trabajadores agropecuarios, forestales y tabacaleros de Ciego de Ávila pretenden consolidar la mayor área sembrada en la historia de la provincia

La frase que da título a esta nota puede parecer una ridícula expresión de chovinismo, pero si presidió recientemente una reflexión pública de un dirigente del país acerca de las potencialidades agropecuarias del territorio, la percepción de su significado trasciende cualquier visión reduccionista o provinciana.

Cuando en predios de la Empresa Agropecuaria La Cuba, Diosnel San Loys Martínez, viceministro de la Agricultura, valoraba lo que Ciego de Ávila significa para hacer realidad que las producciones lleguen a cada destino previsto, lo hacía desde la perspectiva que entraña cumplir la palabra empeñada en la campaña de siembra de frío sin precedentes que ahora se inicia.

Se trata de un compromiso que asciende a 32 510 hectáreas (ha), extensión récord según precisara este viernes Yaisel Vega González, delegado provincial del sistema de la Agricultura, cuyos actores deben plantar 26 451 ha, la mayor parte.

El anuncio confirma que la pretensión de continuar el ritmo ascendente de la campaña de primavera irá de la mano de las condiciones de la actual etapa del año, cuando el clima resulta más favorable y tradicionalmente se obtienen los mejores dividendos sobre los surcos.

No es cosa de llover sobre mojado, ponderar en su justa dimensión lo que han sido capaces de lograr obreros, campesinos, operarios, trabajadores de apoyo, técnicos, directivos, científicos, bajo la guía y la permanente exigencia del Partido y el Gobierno, mientras el aseguramiento logístico de casi todo sigue quedando por debajo de las necesidades reales.

De ahí la importancia estratégica de extraerle mejores “jugos” a las alternativas agroecológicas y los medios biológicos, y de potenciar aún más cultivos rústicos como los de yuca, malanga y plátano, que pueden florecer sin depender de costosos recursos de importación, la urgencia de contar con un estricto control de los portadores energéticos y continuar fomentando la producción local de semillas de calidad.

Sin ánimo de abrumar a través de los datos, vale decir que ha sido una primavera en la cual se plantaron 23 741 ha, de ellas, 2737 ha por encima de lo planificado, y que el salto total se traduce en 5699 ha más que las obtenidas en igual período de 2023.

En medio de un ambiente festivo, quienes asistieron al acto en el que se premió a los más destacados, trascendieron otras prioridades para los hombres y mujeres del sector en la geografía avileña.

Ante las principales autoridades de la provincia y distinguidos visitantes como William Licourt González, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores Agropecuarios, Forestales y Tabacaleros, el delegado provincial de la Agricultura dijo que será necesaria una explotación más eficiente de la maquinaria y el riego, sobre todo donde son palpables los beneficios del crédito saudí.

También se refirió a la trascendencia de ampliar la creación de colectivos agropecuarios —vía idónea para estimular la eficiencia y la productividad—, y de extender mediante el extensionismo las buenas prácticas de los agricultores más destacados.

Si bien el vicetitular de la Agricultura destacó que el esfuerzo nacional redundó en un crecimiento de un cuatro por ciento en el período primaveral, llama la atención que ese número, de algún modo, contrasta con la “esprintada” avileña del 13 por ciento.

De paso, Loys Martínez habló del propósito de alcanzar 17 dígitos por encima en la actual campaña, utilizando como medidor de referencia lo sembrado en similar temporada de 2023.

Entre las prioridades dijo que se aspira a un salto en la producción de frijol, tanto para el balance como para los mercados agropecuarios, satisfacer la demanda del turismo, en lo que se ha retrocedido en los últimos años, y ampliar la producción de semillas.

Sería caer en el abismo del triunfalismo pensar que la mayor área sembrada se traduce mecánicamente en más producciones, habida cuenta de lo que bien saben los agricultores: al campo no se puede dejar de atender ni un día, máxime cuando las cantidades tradicionales de fertilizante de origen industrial, combustibles y lubricantes, piezas y accesorios se han reducido drásticamente.

Salga el sol por donde salga, algo sí no ha cambiado: en materia de agricultura y compromiso de mayor impacto nacional, contraído al pie de las plantaciones, Ciego de Ávila decide. Es Cuba.

Movimiento político-productivo Sin perder un día por la dignidad de la agricultura avileña. Resultados emulativos campaña de primavera

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