Ganarle arroz a la humedad
Por: Grupo Web del Minag
19 de noviembre 2025
Los trabajadores de la Empresa Agroindustrial de Granos Fernando Echenique (GRANMAX, su sello comercial) no se amilanan ante el desastre que el huracán Melissa provocó a su paso por la oriental provincia de Granma: luchan por resarcirse de los daños y sacarle partido al arroz que tenían a punto de cosecha y en otros estadios.
La información ofrecida por la dirección de la entidad a este Sitio Web refleja que de las 7 mil 714 hectáreas que estaban sembradas de arroz y se inundaron, 390 se pudieron cosechar y mil 93 más están en etapa de recuperación.
Las plantaciones que están de cosecha y aún quedan acamadas, es decir, dobladas o tiradas al suelo, hacen más lento de lo ordinario el paso de las cosechadoras, lo que unido a la constancia de la falta de electricidad pone en peligro la calidad de los granos.
Recientemente, Oslando Linares Morell, presidente del Grupo Empresarial Agrícola, al que se subordina la entidad, sostuvo un intercambio sobre el programa arrocero de Granma, en el cual participaron Yanetsy Terry Gutiérrez, gobernadora de la provincia, y Vladimir Regueiro Ale, ministro de Finanzas y Precios.
El objetivo principal del diálogo, con sede en las áreas que se preparan para la siembra de la campaña de frío en la EAG Fernando Echenique, “se centró en la necesidad de fortalecer la producción arrocera en un contexto donde la seguridad alimentaria se convierte en un tema prioritario”, explicó Linares,
De ahí la importancia de la colaboración entre los distintos niveles de gobierno para garantizar que los agricultores cuenten con los recursos y el apoyo para realizar una cosecha exitosa.
“La siembra que se avecina no solo representa una oportunidad económica, sino también un símbolo de esperanza para las comunidades locales que confían en el arroz como un alimento básico en su dieta”, precisó.
Plantaciones aseguradas
Especialistas de la Empresa del Seguro Agropecuario recorrieron las plantaciones de arroz, en la Agroindustrial Fernando Echenique; allí conversaron con Antonio González Guerra, productor vinculado a la UEB La Gabina, en un área dedicada a la producción de semilla básica, de la variedad cubana LP-5 en fase de cosecha.
Como la humedad en el campo aún era alta, Antonio decidió cortarlo a mano y luego beneficiarlo con la cosechadora, “si se recoge con maquinaria corremos el riesgo de perder mucha más cantidad porque los granos se quedan en el campo”, precisó.
Y señaló a un área de una hectárea, que era para realizar la siembra en el campo 4, del lote para la producción de semilla certificada, pero después de los primeros cinco días bajo el agua, el productor considera que no responderá al propósito inicial, pero lo recolectarán para procesarlo y destinarlo al consumo.
Armando Aguilar Rodríguez, otro productor vinculado a la granja 2, la Gabina, también dedicado a la producción de arroz para semilla, comentó que toda su plantación de 56,28 hectáreas, totalmente revolcada por la furia de los vientos de Melissa estaba asegurada, lo que le permite recuperar parte de la inversión para seguir produciendo.
“Este campo, que habíamos sembrado el 7 de julio, tenía un pronóstico de rendimiento agrícola de 4,4 toneladas por hectárea, y una producción total de 247,2 toneladas. Ahora, en dependencia de su calidad, será su destino: semilla o consumo”, enfatizó Armando.
“Como medida de prevención, unos días antes habíamos drenado ese campo, por lo que, de ser posible la entrada de las combinadas, la afectación sería menor; quizás podríamos recuperar al menos, la mitad de lo previsto”, sentenció el productor.
Ayudar a la comunidad
A pesar de la devastación que causó Melissa sobre los campos de arroz que estaban a punto de cosecha o en crecimiento en la Empresa Fernando Echenique, varios de sus colectivos han ocupado tiempo en restañar daños también en las comunidades.
Marlén Mosquera, comunicadora de la entidad comentó: «La ayuda hacia la comunidad es fundamental; contribuye al bienestar colectivo, mientras fortalece la confianza y el compromiso social, generando un impacto positivo y duradero en la vida de las personas.
“Nuestra empresa apoya la higienización en la calle Hola, en el reparto Rosa La Bayamesa. Este esfuerzo mejora las condiciones de vida de los habitantes de la zona, fomenta el sentido de unidad y de colaboración entre los vecinos, demostrando que juntos podemos construir un entorno más saludable y sostenible.»
