Una indiscutible tendencia al crecimiento en la producción de bioproductos en Cuba.
Por: Yuri Muñoz Perdomo del Grupo Web del Minag
31 de mayo 2025
El Ministerio de la Agricultura (Minag) es la entidad nacional cubana encargada del organizar, planificar, implementar y controlar la producción, desarrollo y uso de los biofertilizantes, bioestimulantes y bioplagicidas de uso agrícola con los demás organismos de la Administración Central del Estado y las entidades que procedan y de manera específica en el desarrollo de nuevos bioproductos y su registro.
También asume el control de la demanda, el balance nacional de los bioproductos y de las autoridades competentes; el uso integrado y la complementariedad de los fertilizantes minerales; las acciones para restablecer y crear nuevas capacidades para su producción; de las entidades especializadas que ejecutan sus escalados y la transferencia de tecnología de las entidades que los generan; de la calidad de las producciones y sus aplicaciones; así como de un programa de enseñanza, educación, capacitación, comunicación y sensibilización a directivos, técnicos, productores y población en general sobre su uso.
Cada vez son más las naciones que abogan por el uso de productos orgánicos de origen natural para la fertilización y la protección de los suelos, en sustitución del empleo de formulaciones químicas que, si bien son más efectivas y tradicionales, también se vuelven más costosas y dañinas para la salud humana y vegetal.
Aunque el origen de los bioproductos para la nutrición de las plantas en Cuba se remonta a décadas, recientemente, a partir de la aprobación e implementación de La Ley de Soberanía Alimentaria y Seguridad Alimentaria y Nutricional, se dio impulso a un nuevo programa para el desarrollo y uso de estas formulaciones orgánicas, con la novedad del enfoque local, donde el municipio juega el rol esencial.
Dagoberto Rodríguez Lozano, jefe del Programa Nacional de Suelos y Fertilizantes del Minag, plantea que los bioproductos de uso agrícola son más sostenibles en el contexto actual de la economía que los productos importados atendiendo al tipo de cambio, con precios diferenciados de cara al mercado de los productos finales que resulten del manejo agroecológico.
Su aplicación e implementación garantiza la restitución parcial y el aprovechamiento de los nutrientes del suelo, la protección del medio ambiente, así como la preservación de la sanidad vegetal y se ejecuta en correspondencia con lo establecido en las tecnologías aprobadas para cada cultivo.
Igualmente, su uso integral se incorpora en las tecnologías agrícolas y estrategias de protección de los diferentes cultivos permanentes y temporales como un complemento del manejo sostenible de nutrientes y el manejo integrado de plagas de conjunto con los fertilizantes y plaguicidas de origen mineral, químico y bioquímicos.
¿Cuáles son los ministerios y entidades que asumen y establecen las disposiciones regulatorias y el control de la calidad de esos bioproductos?
– Los ministerios de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) y Agricultura (Minag) son los encargados de establecer las disposiciones regulatorias y el control de la calidad mediante sus centros, institutos y laboratorios, y la Dirección de Suelos y Fertilizantes del Minag ejerce el control de la demanda y el registro de los biofertilizantes y bioestimulantes del país.
¿Por qué el país desarrolla nuevos bioproductos?
– El desarrollo de nuevos bioproductos está dirigido a garantizar su habilidad permanente y su mejora continua, perfeccionando su eficacia y efectividad. La comercialización de los nuevos bioproductos está condicionada al cumplimiento de su registro, de acuerdo con lo establecido en las normas legales vigentes en materia de fertilizantes minerales, orgánicos, órgano-minerales, biológicos, enmendantes, correctores y estimulantes de los suelos y de los productos fitosanitarios y plaguicidas.
¿Cuáles han sido las tendencias en la producción de fertilizantes químicos y biológicos y la importación en toneladas y de biostimulantes industriales en los últimos años en el país?
– La importación de dichos productos en el país ascendía en 2017 a unas 344 toneladas y ya al cierre de 2024 representaba tan solo unos nueve millones mil toneladas; y en el caso de los biofertilizantes, su producción nacional era de 881,8 litros en 2019 y para 2024 se producían tres millones 701 mil litros.
En el caso de las áreas agrícolas beneficiadas con los bioproductos se puede confirmar que en 2019 se beneficiaron 209 mil hectáreas, y en 2024 superaba las 762 mil hectáreas, lo que permitió sostener rendimientos y producciones razonables en estos años.
Planta de bioplaguicidas y biofertilizantes de Villa Clara
¿Ha crecido la cantidad de centros de humus de lombriz en el territorio nacional?
-¡Claro! En 2021 existían unos 400 en todo el territorio nacional y en la actualidad ya contamos con unos mil 300, de ellos, se ha creado en los últimos años en los últimos 18 meses 535 nuevos, lo que también producen humus líquido. La lombricultura es una técnica que permite la trasformación entre otros, de los residuos sólidos orgánicos que se generan como desechos de las cosechas agrícolas, por medio de la acción combinada de lombrices y microorganismos.
La producción del humus liquido mejora los rendimientos y la calidad de los productos a menores costos, y con la misma cantidad de sólido se benefician veinte veces más áreas.
¿Cómo se ha comportado la producción de humus de lombriz y bonos orgánicos en los últimos años en el país y cuántas han sido las aéreas beneficiadas?
– En 2022 se producían solamente unas 37 mil 324 toneladas y para el cierre de 2024 era superior a las 70 mil. En el caso de las áreas que se benefician, en 2018 representaban 220 mil hectáreas y ya para 2024 superaban las 819 mil 600 hectáreas a todo lo largo del archipiélago cubano.
Es prácticamente una necesidad imperiosa, a partir del déficit de fertilizantes y, por otra parte, estamos implementando las normas de suelo que llevan a un uso más eficiente de estos productos, y también las normas de bioproductos recientemente aprobadas, que van cerrando las brechas que pudieran existir para el desarrollo actual y futuro del uso de los bioproductos en Cuba.
Ratificamos que en el contexto actual y futuro, el desarrollo, producción y uso de los bioproductos será prioridad para el país como soporte para garantizar la seguridad alimentaria y nutricional.